Días atrás, la Cámara 1ª del Crimen de Río Cuarto absolvió a un hombre que estaba acusado de haber causado la muerte de su pequeño hijo tras haberlo zamarreado en 2017. Se trata del caso del pequeño Pedro Gambero, quien tenía 3 meses.
Gonzalo Gambero, su padre, había llegado al banquillo de los acusados ante el jurado popular.
El fiscal de Cámara, Julio Rivero, había pedido que sea condenado a la pena de prisión perpetua al considerarlo penalmente responsable del delito de lesiones calificadas y homicidio calificado por el vínculo.
La defensa, en tanto, había reclamado la absolución.
Tras analizar la prueba obrante, los jueces absolvieron al acusado.
El abogado Carlos Nayi, quien representa ahora a la madre del pequeño fallecido, Lucrecia Piñeiro, señaló que se recurrirá el fallo absolutorio ante el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba.
Según la causa, Pedro, de 3 meses de edad, murió el 25 de agosto de 2017 en el Nuevo Hospital San Antonio de Padua de Río Cuarto.
De acuerdo a la causa, el pequeño había estado durmiendo la siesta con su padre, Gonzalo Gambero. Además, en la vivienda estaba otra nena.
Durante la instrucción, el hombre dijo que, cuando despertó de la siesta, vio mal al pequeño y lo llevó al hospital, donde falleció.
A los médicos de terapia les generó dudas el caso. Las pericias médicas comprobaron signos de hematoma subdural, hemorragia de retina, y edema cerebral. Esas lesiones se consideran características del ?síndrome del bebé sacudido (SBS)?.
Enseguida, se comenzó a sospechar que el pequeño era víctima de zamarreos repetitivos que le habrían provocado graves daños en su cerebro, lo que determinó su deceso.
La causa judicial demoró siete años en llegar a juicio. Y culminó con la absolución del acusado dictada por la Cámara del Crimen 1 de Río Cuarto, con jurados populares, ante la ausencia de elementos de prueba para sostener la acusación.
Por su parte, Rosa Sabena, abogada defensora de Gambero, solicitó la absolución, al entender que no había elementos para considerarlo responsable de la muerte del niño, por el denominado síndrome del bebé sacudido.
La madre del bebé, Lucrecia Piñeiro, siempre acusó al padre del pequeño y reclamó que fuera condenado por homicidio. Piñeiro clama por justicia y por el acompañamiento de la sociedad: ?pedimos justicia terrenal por Pedrito Gambero y fortaleza para quienes buscan la verdad, para que su alma pueda descansar en paz?, expresó antes de una audiencia en el desarrollo de la causa.
Gambero estuvo detenido dos meses y luego esperó el juicio en libertad porque se interpretó que no había riesgo procesal. Así fue que finalmente llegó al juicio que terminó hace pocas semanas.
La voz del Interior 8-4-24